Como influyen los sentidos a la hora de tomar una copa
Hoy en Slow drinking os traemos un post sobre el papel que juegan los sentidos a la hora de tomar una copa. Sabemos que los sentidos son los mecanismos por los cuales percibimos el mundo que nos rodea, ver un amanecer, oír nuestra canción preferida, oler la frescura de la hierba recién cortada, saborear nuestra comida preferida o el frescor de una ducha en un día sofocante de calor. Todos los sentidos se unen a la hora de tomar una copa para poder sacar el máximo partido a la experiencia.
Gusto
Podemos decir que este es el sentido más importante, junto al olfato es el que más conoce nuestros gustos, si lo cuidamos y enseñamos no nos suele fallar, nos dice si aquello que degustamos esta bueno o no. Debemos decir que el gusto es muy personal, lo que para una persona es bueno o esta muy bueno para otra puede que sea normal o incluso que no le guste, eso siempre lo debemos tener en cuenta cuando se recomienda un cóctel una comida o incluso un perfume.
Olfativo
Es uno de los más importantes, ya que nos ayuda a identificar si la copa esta a nuestro gusto. Además nos envuelve de una atmósfera aromática de florales, frutales, dulces, etc. en la que trasladarnos a lugares o recuerdos, dado que el olfato es uno de los sentidos más propicios para recordar. Al percibir un olor familiar, nuestro cerebro se traslada directamente al momento en el que lo olimos por primera vez o bien cuando este olor fue importante para nosotros.
Visual
Como se dice, todo nos entra por los ojos. La apariencia es tan importante como el olfato o el gusto, si una copa es atractiva nos la vamos a tomar más a gusto que una que no lo sea, muchas veces se come o se bebe por la vista.
Auditivo
La función inicial de este sentido era mantenernos en alerta y alertarnos de un peligro antes de que estuviera demasiado cerca. La evolución humana ha derivado en ser una herramienta comunicativa, más que de alerta, pero siempre tendrá la función de alerta. Como el perro de Pávlov empezaba a salivar al escuchar la llamada para comer, nuestro cuerpo se prepara para degustar cuando escucha abrir la botella o introducir los hielos en la copa.
Tacto
El tacto en este caso no juega un papel fundamental, pero hace que la experiencia sea perfecta, el simple hecho de que la copa este fría ya nos da una sensación de refrescarnos, o que la copa este lisa, para que a la hora de acercarla a los labios para dar el primer sorbo.
La diferencia entre una buena experiencia y una experiencia perfecta son los detalles.
Debemos recordar que siempre la ingesta de alcohol debe ser con amigos y en momentos lúdicos o para degustar, siempre con responsabilidad y respetando las cantidades.